EL MISTERIO DE LA VIDA – (Salmo 138, 13-14)

-HOY, a través de los medios, se banaliza este Gran Misterio, reduciéndolo al gozo sexual…

- La Palabra de Dios nos hace reflexionar: que si bien ello trae el gozo de la entrega mutua, del hombre y de la mujer, este acto está rodeado de misterio y admiración.

-Así lo vemos en el Salmo 138,13-14, cuando le dice a Dios:

“Tu creaste mis entrañas;

me plasmaste en el seno de mi madre:

te doy gracias porque fui formado de manera tan admirable!..

Qué maravillosa son tus obras!..”

-Debemos considerar que el placer del sexo es un acto abierto a la concepción, luego a su crecimiento-formación en el seno de la madre..

Nos lleva a considerar esa fuerza impresa en esa unión del óvulo y del espermatozoide!.. Fuerza que no es errática!..  sino definida… (No es un ”montón de células” como nos quieren hacer creer…) que paulatinamente va creciendo… hasta completar la formación  del cuerpo del que va a nacer!..

Esto es para detenernos y pensar!.. Es el Misterio de la vida!.. (Vida que se nos regaló!.. Nadie pudo ordenar nacer de tales padres ni siquiera en tal lugar… Nos la regalaron! No somos dueños. Debemos cuidarla! Y respetarla!)

El Misterio de la Vida es para pensar y “admirar”… como lo hizo la mamá de los siete hermanos Macabeos:

“Yo no sé cómo ustedes aparecieron en mis entrañas.

No fui yo quien les dio el espíritu y la vida.

Ni la que ordenó armoniosamente los miembros de sus cuerpos!..” (2 Macabeos 7,22)

De dónde saca el hombre ese poder? Quién se lo dio? Es para pensar, admirar, y cuidar la Vida, honrándola!

El enemigo busca hacernos creer que el mero conocimiento del hombre lo libera de su naturaleza?..  Hasta dónde?.. Lo libera o esclaviza a una ideología sin fundamento en la realidad?

Lo que libera al hombre es el AMOR. Tanto la inteligencia como el conocimiento deben estar al servicio del AMOR (con mayúscula!), que significa “entrega” al otro, “renuncia” a sí mismo (a sus caprichos), “buscar el bien de la otra persona”… Esto cuesta, pero de ello resulta la alegría que llena nuestra persona.

Nos detenemos A REFLEXIONAR?..