CADA
UNO RECIBIRÁ LA ALABANZA QUE LE CORRESPONDA… - 1 Co.4,1-5
-Pablo le dice a los
de Corinto que somos “servidores de Cristo, y administradores de los
Misterios de Dios”, de los bienes espirituales y materiales, que
Él ha puesto en nuestras manos: “el proyecto de una nueva humanidad, donde Dios sea
el Rey”, proyecto que llamamos el Reino de Dios…
-Y que “lo que se pide
a todo ‘administrador’ es que sea FIEL…” que ‘no defraudemos al
Señor que nos ha encomendado la extensión de su Reino’.
Hemos sido hallados
por Jesús, nos ha seducido amorosamente, nos ha dado su amistad, su Persona… y
ahora quiere que participemos de su Proyecto a todos
los demás…
La mirada del Justo Juez... |
-No obstante, sigue diciendo Pablo, consciente de su debilidad, que a él no le hace mella ningún
tribunal humano… que ni siquiera se juzga a sí mismo!..
Y que, aunque su
conciencia nada le reproche, ésto “no lo justifica”
(no lo hace ‘justo’, no lo hace ‘santo’…), porque “EL JUEZ ES EL SEÑOR!”, quien todo lo ve, quien
todo lo sabe (Él nos hizo!), quien “conoce a fondo nuestras intenciones secretas…”
-POR TANTO: (y aquí viene lo práctico y difícil!): trabajemos,
administremos, sirvamos…
y “NO HAGAMOS JUICIOS PREMATUROS”, antes de
tiempo, ya que el Señor sacará a la luz todo lo oculto: todo lo malo y todo lo
bueno que hagamos…
Y… “Él dará a cada uno, la alabanza que le corresponda!..”
“La Salvación de los justos, viene del Señor!” (Sal.36,39)
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