“LA GRANDEZA DE LO PEQUEÑO…” - Mt. 18, 1-5.10.12-14
Los discípulos le preguntaron a Jesús: “quién era el más grande en el Reino de los Cielos”?
-Jesús pone a un niño en medio de ellos, y les dice que “si no cambian, si no se hacen como niños,
NO entrarán en el Reino de los Cielos”…
- O sea: aún hay una oportunidad: cambiar!.. Dejar de lado nuestro “orgullo” que se disfraza de mil modos: de creernos grandes o importantes, queriendo sobresalir, aparentar, imponer nuestro criterio… hasta “creernos víctimas”…
Cambiar a una vida humilde y simple, sabedores de nuestras limitaciones y faltas… Que necesitamos, como los demás – siempre –, del auxilio de Dios. Dios que obra en los humildes y sencillos como Él: manso, “paciente y humilde de corazón”!
-Jesús nos hace una advertencia severa: “cuídense de despreciar a cualquiera de estos pequeños!.. porque sus ángeles están constantemente en presencia de mi Padre!”.
-Dios-Padre, ama a todos. Aún a la oveja descarriada, la rebelde, testaruda que desentona en el Rebaño!.. A ésa, Dios la ama, y quiere que recapacite – le da oportunidades… No quiere que se pierda!
YA QUE POR TODOS DIO SU VIDA!..
Los discípulos le preguntaron a Jesús: “quién era el más grande en el Reino de los Cielos”?
-Jesús pone a un niño en medio de ellos, y les dice que “si no cambian, si no se hacen como niños,
NO entrarán en el Reino de los Cielos”…
- O sea: aún hay una oportunidad: cambiar!.. Dejar de lado nuestro “orgullo” que se disfraza de mil modos: de creernos grandes o importantes, queriendo sobresalir, aparentar, imponer nuestro criterio… hasta “creernos víctimas”…
Cambiar a una vida humilde y simple, sabedores de nuestras limitaciones y faltas… Que necesitamos, como los demás – siempre –, del auxilio de Dios. Dios que obra en los humildes y sencillos como Él: manso, “paciente y humilde de corazón”!
-Jesús nos hace una advertencia severa: “cuídense de despreciar a cualquiera de estos pequeños!.. porque sus ángeles están constantemente en presencia de mi Padre!”.
-Dios-Padre, ama a todos. Aún a la oveja descarriada, la rebelde, testaruda que desentona en el Rebaño!.. A ésa, Dios la ama, y quiere que recapacite – le da oportunidades… No quiere que se pierda!
YA QUE POR TODOS DIO SU VIDA!..
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