UN HOMBRE... DON JOSÉ...

                                                                                          

Don José...

Don José era un “hombre justo”, dice la Biblia.

Y yo pensaba: “Qué cacho de hombre!”

Fijate que no cualquiera puede hacer lo que él hizo!

Estuvo al lado de la “Piba” más linda del barrio... qué digo!.. de la “Piba” más linda del mundo!..,  y me quedo corto!.. de toda la creación!.. Nunca hubo otra igual! Ni la habrá!

Y era tan “linda” que hasta el mismo Tata-Dios le echó el ojo para que fuera Mamá de su Hijo!..

Qué tal?..

El Creador se preparó una Chica... y cómo la preparó!..

La hizo “llena de gracias”, era alguien “graciosa”, en todo sentido: agraciada, amparada, bendecida, querida... con todas las cualidades que pueda tener una mujer...

Y José... este  muchacho carpintero, la había elegido para compartir su vida!..  Qué transparencia habrá visto José en los ojos de María!..Cuánta luz, cuanta pureza!.. la simpleza del agua cristalina!.. su mirada nomás daba ganas de vivir!..

Cuántas veces habrían conversado del Señor... y de cómo rezarían a este Buen Dios!.. y de su consagración a El!..

Ah!.. Y te decía: “Qué hombre!” porque tener una “Piba” tan linda a su lado y no tocar... no tocare esa ROSA tan perfumada... no cualquiera lo hace!..

Creo que Tata-Dios tambien se esmeró mucho en prepararle un “flor” de HOMBRE, para acompañar a la “Llena de Gracias” y cuidar a su Hijo, hecho carne en esas entrañas purísimas...

José tenía que ser reflejo humano de ese “Padre” de todo lo creado...

Jesús tenía que mirar a José, y sentir en él esa seguridad que los niños necesitan, esa firmeza y cariño...

Un hombre “de palabra”: porque tenía que ser el papá “adoptivo” de la Palabra, hecha carne!..

Un hombree trabajador, como su Padre Creador!..

Un hombre, lleno de cariño y Amor, como lo es el Padre Celestial!..

Jesús tenía que “aprender”, como niño, mirando a José...

La Palabra de Dios no dice mucho de José: sólo que era un “hombre justo”... “Justo” como lo entiende siempre la Biblia... “Justo” como es “Justo” Tata-Dios!..

Y “hombre”... “Varón”... bien hombre!..

Y no: que no haya tocado a esa “hermosa mujer”, que permaneció “huerto cerrado” (Cantar 4,12), y “puerta cerrada para todos, porque por ella pasó Dios” (Ez.44,2)... que no la haya “tocado” porque era un muchacho “corto” o “quedado”... No. Nada de eso!

Cuando se enteró que “Aquella” que había elegido y comprometido, estaba “embarazada”... y no de él... cómo reaccionó?..

Era un persona “temerosa” de Dios... que conocía mucho a esa “Chica”, y sabía de su transparencia... y sabía muy bien cuál era la condena por infidelidad... Pero: había “ALGO” que él no entendía... y nunca quiso difamar a esa “Belleza” espiritual... prefirió retirarse, en silencio... sufrir en su corazón... pero no “acusarla”... la amaba y respetaba!..

Pero, cuando Dios le manifestó la Verdad, no dudó. El también hizo lo que Dios le pedía... como María (Mateo 1,24)

Y cuando quisieron asesinarle a “su” Hijo, no dudó un instante: tomó al Niño y a su madre – de noche – y se retiró a Egipto... (mateo 2,14) A un país extraño... El era el responsable de su familia... y así lo hizo!..

Además, como hombre, supo del perfume o aroma de los leños a trabajar... y de las callosidades causadas por las herramientas, golpeando y acariciando las maderas... Supo de privaciones y cansancio para que su esposa e Hijo tuvieran “lo necesario”...

Y como “hombre-padre” le enseñó a su Hijo ganarse el pan con el sudor de su frente... Le enseñó tambien, cómo un “hombre-varón” debe alabar a Dios... No solamente le enseñó un oficio para vivir, sino también le enseñó ser “hombre”... viviendo él como tal!

Creo, que – hoy – debo rendirte homenaje a Vos, José,

José Carpintero, de Nazaret, José el esposo de María...

Pero, debo hacerte honor como “hombre” que fuiste!.. Más en este tiempo (que cuando se habla de “hombre” se entiende otra cosa):

Porque no cualquiera hace lo que vos hiciste!.. y en todo sentido!

No creo que lo que voy a decir, sea así, (mejor: no es así), pero qué bien se aplican estas palabras en Vos, José, cuando Jesús se llama a sí mismo: “EL HIJO DEL HOMBRE”!.. (¿!) No sería porque Vos también fuiste “un flor de hombre”?..

AYÚDAME A MIRARTE E IMITARTE...

COMO “HOMBRE” Y COMO “PAPÁ”   

(1995)