lunes, 16 de diciembre de 2013

La infulencia de las madres...

La influencia de las Madres…

“Los hijos heredan de sus padres su forma de ser, de comportarse, las palabras, costumbres, gestos,
voz…”

Entonces, este sacerdote nos decía que también Jesús, hombre, heredaría de María gestos, modos de pensar, comparaciones, modo de observar la realidad, de rezar...

De allí que Jesús fuera muy observador de la naturaleza: de los pájaros, de los lirios cercanos a la fuente de agua… de los animalitos: pájaros que se vendían a un precio determinado, el comportamiento de las serpientes, las palomas… el trigo: su siembra, cosecha, trilla (separar la paja del grano ventilándolas…), de que una casa debía estar bien asentada en roca firme y no en arena… del valor del agua, cuando acompañaría a su Mamá a buscar agua al pozo o a la fuente: ‘si no había agua, no había vida!…’

Todo eso que fue bebiendo, guiado por María, desde chiquito… luego lo usará en sus sermones o predicación… para que los simples lo entendieran…

El habría observado la simpleza y mansedumbre de las palomas…
Y por otro lado, María le habría señalado lo despierta que era la víbora… atenta, astuta… señalándole a Jesús que debía ser como la paloma: sencillo, pero atento y despierto como la serpiente!.. El, luego, lo usaría como enseñanza…

Porque María había vivido siempre así: simple, amable como las palomas, pero siempre atenta…
Así es que cuando el Ángel le dice que va a ser la Madre del Mesías, Rey… enseguida, atenta, le pregunta: “Cómo va a ser esto, si no tengo relación con ningún hombre?”..
Y cuando el Ángel le manifiesta que Dios mismo se encargaría de eso, inmediatamente dice: “Que se haga en mí según tu palabra!”
Y cuando es invitada a compartir una boda: está despierta, atenta a lo que sucede, a las necesidades de los demás… y con la simpleza de una paloma, pide auxilio a su Hijo, para solucionar ese problema serio para el nuevo matrimonio… “Hagan lo que Él les diga!”

Cómo eres tú, mamá?..


RESURRECCIÓN... qué es? por qué?..

Texto completo de la catequesis de Francisco en la audiencia del miércoles
El santo padre explica la relación entre la resurrección de Cristo y la de los hombres. El cuerpo de cada uno de nosotros es resonancia de eternidad

Ciudad del Vaticano, 04 de diciembre de 2013 (Zenit.org

Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!

Hoy vuelvo de nuevo sobre la afirmación: «Creo en la resurrección de la carne». Se trata de una verdad que no es
Resucité...
sencilla y nada obvia, porque, viviendo inmersos en este mundo, no es fácil comprender la realidad futura. Pero el Evangelio nos ilumina: nuestra resurrección está estrechamente vinculada a la resurrección de Jesús; el hecho de que Él esté resucitado es la prueba de que existe la resurrección de los muertos. Quisiera entonces, presentar algunos aspectos que relacionan la resurrección de Cristo y nuestra resurrección. Él ha resucitado y así, nosotros también resucitaremos.
Antes que nada, la misma Sagrada Escritura contiene un camino hacia la fe plena en la resurrección de los muertos. Esta se expresa como fe en Dios creador de todo hombre, alma y cuerpo, y como fe en Dios liberador, el Dios fiel a la Alianza con su pueblo. El profeta Ezequiel, en una visión, contempla los sepulcros de los deportados que se vuelven a abrir y los huesos secos que reviven gracias a la acción de un espíritu vivificante. Esta visión expresa la esperanza en la futura “resurrección de Israel”, es decir en el renacimiento del pueblo derrotado y humillado (cf. Ez 37,1-14).
Jesús, en el Nuevo Testamento, lleva a su cumplimiento esta revelación, y vincula la fe en la resurrección a su misma persona: “Yo soy la Resurrección y la Vida” (Jn 11,25). De hecho, será Jesús el Señor el que resucitará en el último día a todos los que hayan creído en Él. Jesús vino entre nosotros, se hizo hombre como nosotros en todo, menos en el pecado; de este modo nos ha tomado consigo en su camino de vuelta al Padre. Él, el Verbo Encarnado, muerto por nosotros y resucitado, da a sus discípulos el Espíritu Santo como un anticipo de la plena comunión en su Reino glorioso, que esperamos vigilantes. Esta espera es la fuente y la razón de nuestra esperanza: una esperanza que, cultivada y custodiada, se convierte en luz para iluminar nuestra historia personal y comunitaria. Recordémoslo siempre: somos discípulos de Él que ha venido, viene cada día y vendrá al final. Si conseguimos tener más presente esta realidad, estaremos menos cansados en nuestro día a día, menos prisioneros de lo efímero y más dispuestos a caminar con corazón misericordioso en la vía de la salvación.
Un segundo aspecto: ¿qué significa resucitar? La resurrección, la resurrección de todos nosotros, ¿eh? Sucederá en el último día, al final del mundo, por obra de la omnipotencia de Dios, que restituirá la vida a nuestro cuerpo reuniéndolo con el alma, por la resurrección de Jesús.
Esta es la explicación fundamental: porque Jesús resucitó, nosotros resucitaremos. Tenemos esperanza en la resurrección por que Él nos ha abierto la puerta, nos ha abierto la puerta a la resurrección. Esta transformación en espera, en camino a la resurrección, esta transfiguración de nuestro cuerpo se prepara en esta vida mediante el encuentro con Cristo Resucitado en los Sacramentos, especialmente en la Eucaristía. Nosotros que en esta vida nos nutrimos de su Cuerpo y de su Sangre, resucitaremos como Él, con Él y por medio de Él. Como Jesús resucitó con su propio cuerpo, pero no volvió a una vida terrena, así nosotros resucitaremos con nuestros cuerpos que serán transfigurados en cuerpos gloriosos. Esto no es mentira, ¿eh? ¡Esto es verdad! Nosotros creemos que Jesús ha resucitado, que Jesús está vivo en este momento. ¿Creéis que Jesús está vivo, que está vivo? ¡Ah, no creéis! ¿Creéis o no creéis? Y si Jesús está vivo, ¿pensáis que Jesús nos dejará morir y nunca nos resucitará? ¡No! ¡Él nos espera! Y como Él está resucitado, la fuerza de su resurrección nos resucitará a nosotros.
Ya en esta vida nosotros participamos de la resurrección de Cristo. Si es verdad que Jesús nos resucitará al final de los tiempos, es también verdad que, en un aspecto, ya estamos resucitados con Él. ¡La Vida Eterna comienza ya en este momento! Comienza durante toda la vida hacia aquel momento de la resurrección final ¡Ya estamos resucitados! De hecho, mediante el Bautismo, estamos insertos en la muerte y resurrección de Cristo y participamos de una vida nueva, es decir la vida del Resucitado. Por tanto, en la espera de este último día, tenemos en nosotros una semilla de resurrección, como anticipo de la resurrección plena que recibiremos en herencia. Por eso también el cuerpo de cada uno es resonancia de eternidad, por tanto ha de ser respetado siempre; y sobre todo debe ser respetada y amada la vida de todos los que sufren, para que sientan la cercanía del Reino de Dios, de esa condición de vida eterna hacia la que caminamos. Este pensamiento nos da esperanza. Estamos en camino hacia la resurrección. Esta es nuestra alegría: un día encontrar a Jesús, encontrar a Jesús todos juntos. Todos juntos, no aquí en la Plaza, en otra parte, pero alegres con Jesús. Y este es nuestro destino.
(RED/IV)


domingo, 20 de octubre de 2013

La Lectura de la palabra... (2 TIMOTEO 3,14-4,2)


La Palabra de Dios instruye...
Educa a los que se acercan a ella...
Te prepara para que puedas desempeñarte siempre, haciendo el bien...
La Palabra de Dios te ayuda a enseñar a los demás...
con ella puedes corregir.. tus errores y el de tus hermanos...
Con ella puedes animar, comprometer  a vivir la Vida Nueva de Dios...
Ella te hará más justo (comprenderás el Plan Salvador de Dios = su Justicia... SU AMOR...)

Pídele al Espíritu Santo te abra la mente y puedas comprender las Sagradas Escrituras...
para que todo esto se haga realidad en tu vida.

Moisés oraba, sobre el monte ayudado por Aarón y Jur... (Éxodo 17, 8-13)

Y Josué peleaba contra los Amalecitas...
Mientras Moisés oraba con los brazos en alto, Israel vencía...
Cuando Moisés cansado, bajaba los brazos, vencían los Amalecitas...
Aarón y Jur traen una piedra para que se siente Moisés y uno a cada lado sostienen sus brazos en oración... Y así triunfan sobre el enemigo...

Es que la fuerza de hombre solo, NO BASTA!... se necesita también la ayuda de Dios...
y tampoco la oración sola, sin la colaboración, sin el esfuerzo del hombre, nada se logra...

Moisés se cansa... nuestro Papa se cansa. Nuestro Obispo se cansa. Nuestro Párroco se cansa... es que son humanos...
Tu le acercas una piedra para que pueda descansar?... Te acercas para ayudar a sus brazos suplicantes?..
Sin oración no podremos evangelizar.
Pero, también debemos ir - primero - a dónde debe ir Jesús... "Los envió a las ciudades y lugares a dónde iba a ir Él"... Tenemos que ir, para que también Jesús vaya "a las periferias" como dice el Papa...
No nos olvidemos de "sostener los brazos suplicantes" de nuestros pastores...

Ellos necesitan el calor del cariño de sus feligreses... de aquellos a cuyo cargo están... de la fuerza de las oraciones de su pueblo... "así sus brazos se mantuvieron firmes hasta la puesta del sol..."

jueves, 10 de octubre de 2013

Hay pescas malas?...

No hay pescas malas, si los esfuerzos fueron adecuados...
Sí. Como lo hicieron los apóstoles. Obedecieron al Señor.
Cualquiera puede preguntar: qué diferencia hay entre tirar la red a la derecha o a la izquierda?
Pero ellos - luego de toda la noche de fracaso - le hacen caso a este "desconocido"...
Y tienen la "sorpresa"!.. - "Es el Señor!"- dijo Juan. (Juan 21,1-14)

Además, hay "malos" resultados que se transforman en positivos... Eso sí: siempre haciendo lo que nos manda Jesús...  Dicho de otra manera: Dios escribe derecho en renglones torcidos. Los renglones torcidos somos nosotros, el ambiente...
Ningún "apostolado" será un fracaso si lo hacemos con Jesús: con AMOR a Él, que transmitimos a los demás...
El Espíritu Santo nos urge "PROCLAMAR" el Mensaje de Salvación (Hechos 5, 27-41): ante las amenazas del Sanedrín, Pedro responde: "Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres..." Los apóstoles - antes tímidos - ahora llenos del Espíritu Santo, se han llenado de corage y hacen frente a las amenazas, y se alegran de sufrir, de "ser dignos de sufrir por el Nombre de Jesús"...

Concédenos - Señor - tamaña valentía!...

Un pequeño detalle...

Pedro y otros discípulos fueron a pescar...
Jesús se les aparece a la orilla...
Habían estado toda la noche y no habían pescado nada...
Jesús los espera en la orilla... - "Tienen algo para comer?"
- "Nada!"- le dijeron.
- "Echen la red a la derecha..." (?)
Recogieron tantos peces... Juan le dice a Pedro: - "Es Jesús!" (Juan 21, 1-14)

Cuando llegan a la orilla ya Jesús les había preparado el fuego, y tenía un pescado a las brasas y pan para ellos...
Un pequeño gesto... para concluir una noche de trabajo, sin resultados hasta que apareció Él.
Qué lindo que es un asado a primera hora del día, y junto al río... luego del esfuerzo de la noche... sentarse a compartir un asadito... una comida y pan calentito!..

Esta es la atención con que Jesús nos espera cada día al realizar la Eucaristía...
Sabe de nuestro esfuerzo y cansancio, por éso quiere compartir su mesa con nosotros... Y el "alimento" es Él mismo...  Un "pan de Ángeles"... con todas sus virtudes y poderes... un alimento que "nos asimila a nosotros": nos transforma de débiles en fuertes!..

Lo aprovechamos?...

lunes, 16 de septiembre de 2013


Rezás por las autoridades actuales?..

Me dices que no, porque no son de “tu partido político”?...


Y cómo pretendemos que Dios nos conceda “disfrutar de paz y tranquilidad”?...
Cómo pretendes poder “llevar una vida piadosa y digna”?...
Si tu no oras por las autoridades actuales?
Si tu no pides por todos los gobernantes?
Si tu no suplicas por todos ellos?
Más: si tu no das gracias por todos ellos?...

La Palabra de Dios es muy clara en este tema:
Ante todo, les recomiendo que hagan peticiones,
oraciones,
súplicas
y acciones de gracias por TODOS los hombres,
por los soberanos,
y por las autoridades,
para que podamos disfrutar de paz y de tranquilidad,
y llevar una vida piadosa y digna… – Pablo en 1 Timoteo 2, 1-8

Pablo dice “ORAR POR TODOS” (y por las dudas aclara que entre ellos están las “autoridades” y “gobernantes”!...) porque “Dios quiere que todos se salven”…

Luego dice: “Por lo tanto: quiero que los hombres oren constantemente, levantando las manos al Cielo, con recta intensión, sin arrebatos ni discusiones!

Todos, hermanados… nos ponemos a la obra?...




 Catholic.net nos propone la inquietud…

Campaña del mes: Oración por nuestros Gobernantes

No ha habido otro momento en la historia, como hoy, en el cual los gobernantes, hombres que han sido constituidos por Dios para guiar el destino de las naciones mediante el recto gobierno de las realidades temporales, se hayan visto sometidos a tantas presiones de índole internacional, y a tentaciones que intentan separarles de la importantísima misión para la que el Señor les ha llamado.
¡Únete a esta cruzada de oración!

                                  Ingresa a: http://es.catholic.net/oraciongobernantes/

domingo, 15 de septiembre de 2013

En el “Año de la Fe”…  en el mes de la Biblia

Te alegras cuando alguien regresa a “Casa”…

El hermano mayor, siempre estuvo junto al Padre… pero no compartía su modo de pensar y actuar…
Prueba de ello, es que cuando vuelve su “hermanito perdido”, se enoja con su Padre, y no quiere saber nada con la fiesta que le hace para “recibirlo”…
Más: le reprocha a su Papá: ese hijo “tuyo”… gastó “tu” dinero en prostitutas… y ahora, encima, le haces una fiesta?
El Padre Bueno y paciente con este hijo “mayor”, celoso, egoísta y disconforme con el modo de pensar y obrar de su papá… sale a “buscarlo” a él también!.. porque es “tu” hermano quien ha vuelto…  “lo hemos encontrado”… quiere que él también participe de su alegría… él también debe estar involucrado en este “hallazgo” feliz!... – Lucas 15, 25-32

Señor, que quieres que todos se salven, no nos permitas mirar con recelo a los hermanos que vuelven a tu Iglesia,
ayúdanos a alegrarnos, a recibirlos, a estar a su lado para que se sientan en su casa…
porque son “hermanos”,  hijos tuyos, Padre! Y Tú te das a todos!... sobre todo a los más pequeños, y más pecadores…
Yo también soy pecador, aunque hace tanto tiempo que estoy en tu casa (pero no te conozco: no comparto tus pensamientos, al igual que el hijo “mayor”…)

Perdóname a mí también… y ven en nuestra ayuda!..


LECTURAS DEL DÍA: Éxodo 32, 7-11.13-14; Salmo 50, 3-4.12-13.17.19; 1 Timoteo 1, 12-17; Lucas 15, 1-10(32)*

HOY es el Domingo 24º durante el Año -



Puedes visitar
El Blog de “Semillas de Vida”: http://semillasdevida-carcarana.blogspot.com.ar/

“CRISTOHOY.ORG”: un nuevo sitio para estar informado…entrá a:                                
                                                        http://www.cristohoy.org/home/1/principal.php




Día 15 de Septiembre de 2013 - Domingo

domingo, 1 de septiembre de 2013

El Papa convoca jornada de ayuno y oración por la paz
en Siria, Medio Oriente y el mundo

VATICANO, 01 Sep. 13 / 09:31 am (ACI/EWTN Noticias).- El Papa Francisco anunció hoy, en sus palabras previas al rezo del Ángelus, la convocatoria a toda la Iglesia para una jornada de ayuno y oración para el 7 de setiembre, por la paz en Siria, en Medio Oriente y en el mundo entero.

Hermanos y hermanas, he decidido convocar para toda la Iglesia el próximo 7 de septiembre, víspera de la fiesta de la Natividad de María, Reina de la Paz, una jornada de ayuno y de oración por la paz en Siria, en Oriente Medio, y en el mundo entero”, dijo.

El Santo Padre hizo extensiva esta invitación al ayuno y oración, “según el modo que considerarán más oportuno, a los hermanos cristianos no católicos, a los pertenecientes a las demás religiones y a los hombres de buena voluntad”.

“El 7 de septiembre, en la Plaza de San Pedro, aquí, desde las 19:00 y hasta las 24:00, nos reuniremos en oración y en espíritu de penitencia para invocar de Dios este gran don para la amada nación siria y para todas las situaciones de conflicto y de violencia en el mundo”.

El Papa exclamó que “¡la humanidad tiene necesidad de ver gestos de paz y de escuchar palabras de esperanza y de paz!”.

“Pido a todas las Iglesias particulares que, además de vivir este día de ayuno, organicen algún acto litúrgico según esta intención”.


miércoles, 28 de agosto de 2013

"Sepulcros blanqueados..."?...

Hipocrecia…
 
La Vida Cristiana es hermosa, pero recuerda: está rodeada de espinas
Muchas veces nos preocupamos de cómo es vista la Iglesia por el Mundo…
Para colmo vemos que muchas veces el mundo tiene razón en criticar nuestra conducta que no es acorde con nuestras palabras… y menos con la Doctrina de Jesús.

No será que queremos “fingir”, o aparecer como “santos” cuando en realidad nuestro corazón está lleno de maldad, como “sepulcros blanqueados”?...
No será que nuestra Iglesia-hoy es “hipócrita” y que Dios saca a la luz nuestras maldades para purificarnos… para nuestra conversión… y que dejemos de cuidar o estar atento al “qué dirán” los demás si se enteran de que somos pecadores!?...

Es que no somos pecadores?...
Nuestra madre… no nos concibió en pecado, -como dice el Salmo?..

No es que la Iglesia está compuesta de “pecadores” que quieren cambiar su modo de vida?... La Iglesia – en la tierra - no es un lugar de “santos”, sino de pecadores "que quieren" ser santos!..?

Benditas persecuciones… benditas acusaciones que señalan nuestros pecados… porque es una oportunidad que Dios nos da para que cambiemos de vida!.. para que corrijamos nuestra conducta!
Dios que nos recuerda que somos débiles y debemos estar agarrados a Él, para no claudicar y no escandalizar a los débiles…
 Gracias, Señor, por tu Misericordia!..

viernes, 12 de julio de 2013

LA LUZ DE LA FE (1)

En el “Año de la Fe”…

El Papa Francisco concluye la Encíclica “LA LUZ DE LA FE” con esta oración, que resume sus pensamientos:

¡Madre, ayuda nuestra fe!
Abre nuestro oído a la Palabra, para que reconozcamos la voz de Dios y su llamada.
Aviva en nosotros el deseo de seguir sus pasos, saliendo de nuestra tierra y confiando en su promesa.
Ayúdanos a dejarnos tocar por su amor, para que podamos tocarlo en la fe.
Ayúdanos a fiarnos plenamente de él, a creer en su amor,
sobre todo en los momentos de tribulación y de cruz, cuando nuestra fe es llamada a crecer y a madurar.
Siembra en nuestra fe la alegría del Resucitado.
Recuérdanos que quien cree, no está nunca solo.
Enséñanos a mirar con los ojos de Jesús, para que él sea luz en nuestro camino.
Y que esta luz de la fe crezca continuamente en nosotros,
hasta que llegue el día sin ocaso, que es el mismo Cristo, tu Hijo, nuestro Señor.
(Lumen Fidei, nº 60)




LECTURAS DEL DÍA: Génesis 46, 1-7.28-30; Salmo 36, 3-4.18-19.27-28.39-40; Mateo 10,16-23*

HOY SAN JUAN GUARLBERTO – 995/1073 – abandona su uniforme militar y sus armas y entra a un convento de Benedictinos… fundador de varios conventos – luchó contra la simonía (=comprar los puestos dentro de la Iglesia) y toda corrupción… VER MÁS EN: http://www.ewtn.com/spanish/saints/Juan_Gualberto_7_12.htm



Puedes visitar el Sitio Parroquial: allí encontrarás los horarios Parroquiales y programas: https://sites.google.com/site/elpilardecarcarana/home




Día 12 de Julio de 2013 – Viernes



miércoles, 10 de julio de 2013

Cuando pedís... cómo lo hacés?...



En el Evangelio de Lucas 11, 1-13, cuando Jesús les enseña rezar el “Padre Nuestro” a sus discípulos, a continuación agrega algo para tener en cuenta...
Y  más que una “recomendación”, me suena a “reproche” en nuestra manera de pedir...

Muchas veces hemos escuchado que debemos dar gracias, como si ya hubiéramos obtenido lo que estamos pidiendo... pero: esto va a ser sincero, si lo hacemos con plena confianza...

Hoy, el escuchar las palabras de Jesús:
“...les aseguro:
pidan y se les dará!..
Busquen y encontrarán!...
Llamen y se les abrirá!..
Porque el que pide, recibe. El que busca, encuentra! Y al que llama, se le abre!..”
y lo que sigue,
    se me presentan como una “queja” de Jesús, poniéndola en boca del Padre:

“Acaso Ustedes que son malos, no dan cosas buenas a sus hijos?..”
“Ustedes, padres, cómo se portan con sus hijos cuando les piden pan...?”
“Y se creen que Yo soy peor que Ustedes...?    para que no los tenga en cuenta?...”

Pensaba que, tal vez, me estoy escondiendo detrás de: “Dios sabe lo que necesito... y me va a dar lo que me conviene...”
Es cierto... pero, no esconderé detrás de esas palabras mi “desconfianza”, cuando le pido algo?...
Jesús nos dice que lo debemos pedir con “seguridad”!.. concretamente y con confianza!.. e insistir!

Claro está, también... lo que Jesús agrega al final:
“Si ustedes que son malos...
saben dar cosas buenas a sus hijos,
cuánto más el Padre del Cielo dará el Espíritu Santo, a aquellos que se lo pidan!...”

A qué viene lo “del Espíritu Santo”?..
Simple: Jesús dijo: “El los instruirá!
Entonces yo le pediré -  luego - al Padre lo que es recto, lo que realmente me conviene (no lo que  a mí me guste, o parezca... etc.)
Lo que indica que mi suplica, plegaria, oración... debe ser firme, confiada, segura... dando gracias,  porque no queda en el aire, sino que llega a sus pies...
y el Padre quiere que nos sintamos abrazados por El... protegidos... mimados,.. y no abandonados...  o arrojados al mundo y “arreglátela!”...
Como si nos dijera: “Mirá... Es que Yo soy tu Padre... y no cualquier cosa!... Confía en Mí!..”

Y volviendo a lo del “Espíritu Santo”... lo pedimos?.. con “insistencia”?... para nosotros, para nuestras autoridades, para nuestros pastores..?
Si lo haríamos: no habría menos confusión?..  No habría menos errores?.. no seríamos más “cristianos”?..
Tal vez nos falte “docilidad” a este “Maestro”?..  Y así sería otra la “luz” en nuestros corazones?..
Pidámosle nos lo envíe, y que luego le seamos “fieles”, dóciles a sus insinuaciones... porque nunca nos violentará!...

25-07-2010 

DAR GRACIAS…



Ninguno volvió a dar gracias, sino este extranjero?”…

Jesús sanó a diez leprosos, pero sólo uno volvió.
No juzguemos a los otros nueve. Porqué? Porque en el interior del hombre hay una idea de que Dios es “algo” como una “aspirina” a la que recurro cuando me duele algo… Y luego, cuando ando bien, ni me acuerdo más de Él…
Creemos que Dios tiene que estar a nuestra disposición, para cuando lo necesito… que es su “deber” estar a mis órdenes… y luego no me acuerdo más de El… Y menos: nunca le agradezco!..

Ser “agradecido” no es ser “interesado”… es saber reconocer que “dependemos de El”… que yo no merezco nada… Que todo es “gratuidad” (=gracia): todo lo que soy, tengo… lo recibí de El… Y no porque yo haya hecho algo para merecerlo…  me recompense…: “El nos amó primero”!... “Nos amó cuando aún éramos malos”…

Pedir… pedimos, y bastante seguido… Y Santiago nos dice que mucho “no recibimos, porque pedimos mal”… Muchos pedimos “salud”: para qué?.. para poder seguir llevando una vida de pecado?... o para ponerme al servicio de mis hermanos, como la suegra de Pedro?..
Qué hermoso debe ser para Jesús escuchar nuestro pedido, y antes de que El lo conceda, ya le estamos dando gracias, porque nos sabemos escuchados…

Oí: “Dios siempre escucha nuestras oraciones”: no se pierden por el camino… no se traspapela en algún escritorio del Cielo… olvidado…
Más: Dios siempre contesta: unas veces inmediatamente, dándonos lo que le pedimos… Otras: con el tiempo… y algunas veces, nos concede algo distinto, que será mucho mejor, más beneficioso…

En esta seguridad, norma importantísima para ser escuchados: es ser AGRADECIDOS!...
Si queremos que los demás reconozcan nuestra ayuda, porqué entonces se la negamos a Dios?..
Porqué no reconocer su Amor, su Providencia, su Bondad, su Cuidado… ya que  “hasta lo pelos de nuestras cabezas están contados… y no se cae ni uno si El no lo autoriza?...”
Porqué no confiar y estar agradecidos?...

Muchas veces protestamos por situaciones que tenemos que vivir, que soportar… Y el Señor la está usando para que nos acerquemos a Él, para que despertemos y reconozcamos su amor que nos cuida y quiere que seamos felices…
Por eso… entendemos cuando alguien da las gracias a Dios por la muerte de un hijo, esposa, padre… porque gracias a ese dolor, terminó acercándose al Señor, al Dueño de la Vida… y descubrió su plan amoroso sobre cada hombre…
Hasta cuando, queriendo ser santos, agradables a Él, le fallamos, pecamos, y volvemos sinceramente a Él… nos perdona, nos comprende… y utiliza eso para que yo cambie, para que está más unido a Él, a través de la oración, de los Sacramentos… Luego de esta situación me obliga a ser “agradecido” por su paciencia, por su perdón, por su espera… porque no es rencoroso, sino rico en misericordia…

Gracias, señor!...
Que nunca  me crea con derecho a exigirte nada!.. ya que “todo” te lo debo a vos!.. Desde la misma vida… Desde que al darme la vida, me destinas a compartir la eternidad con Vos!.. Para esto me creaste. A eso me llamaste! Por esto, tú me auxilias: sabes que si me dejas solo librado a mi mismo…
Gracias, Señor!...y aumenta mi fe en tus promesas…Que siempre seas lo más importante en mi vida! Que te ame, que me enamore de ti… y que desee estar siempre con Vos… pues tu eres todo para mí!...

El otro ejemplo que trae la Palabra de Dios: es alguien “agradecido”: Naamán… vuelve a dar gracias al profeta Eliseo… y quiere darle un presente. Ante la negativa de Eliseo, termina diciendo: “…tu servidor (él mismo) no ofrecerá holocaustos, ni sacrificará a otros dioses, fuera de tu Dios…” (2 Reyes 5, 14-17).
Este hombre recibe la bendición de la sanación: es agradecido y consecuente: hace una profesión de fe en el Dios de Eliseo, y promete comportarse…
Cuántos de los que piden salud, se acuerdan de agradecer al que los curó?.. Ser agradecidos es reconocer la bendición…  y nos exige una respuesta, una actitud distinta en el futuro…una conducta acorde al beneficio o del que nos bendijo!...

No seamos como los restantes  nueve: “dónde están?” 

                                    No los critiques… pues puedes ser uno de ellos…

martes, 9 de julio de 2013

Mi Cristo...

MI CRISTO NO ESTÁ CRUCIFICADO…

Mi Cristo no está crucificado.
Mi Cristo no está en la cruz.
Mi Cristo no está muerto.
Mi Cristo VIVE!..
Mi Cristo tiene Vida!
Es Viviente!..

Mi Cristo no está en el sepulcro.
Mi Cristo Resucitó.
Mi Cristo – aunque murió – VIVE!..
Resucitó,
y - con tal fuerza – que me contagió su vida!
Salió tan triunfante
que yo también triunfé con Él sobre la muerte!
Un día voy a resucitar como Él!.. para nunca más morir!

Mi Cristo no está crucificado.
Mi Cristo fue crucificado!
Mi Cristo no está muerto.
Mi Cristo fue muerto!
          Pero – AHORA –
                    AHORA VIVE!..

Y tu Cruz vacía, Señor,
tu Cruz es signo de Victoria!..
Tu Cruz vacía – para mí –
Es fuente de Vida!
Al pié de ella brotó la Vida a borbotones…
Tu Cruz vacía es signo de tu TRIUNFO:
cuando creyó darte una muerte definitiva,
Tu surgiste destellante de Vida!..
Recuperaste tu Vida – plenamente y para siempre!..

Mi Cristo,
mi Cristo no está crucificado!
Mi Cristo fue crucificado!
Pero ahora VIVE!.. Y está a mi lado!

Mi Cristo no es un objeto de panteón!
Mi Cristo no es objeto de museo!
          Mi Cristo está VIVO… y es mi Amigo!
                    Y me habla!..
                    Y me escucha!.. y camina a mi lado!

MI CRISTO ES DIOS!..
                              Aleluia!..

Al verlo caí como muerto a sus pies; pero me tocó con la mano derecha y me dijo:
No temas nada. Soy Yo el Primero y el Último. Yo soy el que VIVE.
Estuve muerto, y de nuevo soy el que VIVE por los siglos de los siglos;
y tengo en mi mano las llaves de la muerte y del infierno!” – Apocalipsis 1, 17-18

“CRUCIFICADO” significa “fijado en a cruz”.
Mi Cristo colgado del madero, me debe recordar CUÁNTO SUFRIÓ JESÚS!..
Cuánto debió sufrir por culpa de mis rebeldías…
Hasta morir por mí y por mis hermanos…
Me debe hacer ver la gravedad del pecado… y su gran Amor!
PERO: no significa que mi Cristo esté MUERTO!..
                                                                       VIVE!.. Aleluia!...


(09-10-1989)

LA HOJA:...


Tarde de otoño. Caminaba por la calle… llena de hojas secas…
Unas crujían bajo mis pies… otras arrastradas por el viento, dejaban oír sus quejas, rayando contra el
 pavimento…
Algunas amontonadas en un rincón de la vereda, esperaban una escoba… o un fuerte aguacero, que las llevara vaya a saber dónde…

Miraba absorto esas hojas grandes como manos generosas… amarillentas… bellas… a pesar de su estado!.. con sus bordes… y sus nervios sobresalidos, como venas gruesas…
Ellas decían: “Misión cumplida!..” e iban al descanso.
No a la nada.
Sí, habiendo terminado su trabajo, iban a contribuir hasta su total final o transformación… Iban a contribuir con los demás componentes de la naturaleza…

Absorto pensé:
Esta hoja cumplió su misión.
duró poco meses:
amaneció como verde brote… fue creciendo: alimentándose y alimentando… (Contribuyendo a la “fotosíntesis” de la planta, como dicen los estudiosos…)
Dio sombra. Cobijó a las aves. Renovó el aire que respiramos… y ahora abonará la tierra, hasta confundirse en ella!.. para que otros aprovechen de ella.

Sabes, señor…creo que Tú me estás hablando a través de esta hoja:
Nací. Bebí la vida de lo demás.
Y una vez que complete mi siclo, mi cuerpo desaparecerá… por un tiempo.
Para el hombre este desaparecer será un brotar en otra primavera… en la eterna primavera!.. En una Vida nueva y sin fin!
Tengo también como la hoja,
una función, una misión: crecer, desarrollarme, dar ”sombra”, alivio; cobijar a los demás o a quien pida de mí;
renovar el “aire” que respiran nuestros espíritus: haciendo potable el ambiente  en el que deben crecer los demás junto a mí.
Como la hoja, al final,
yo también debo fecundar la tierra…
La hoja… hace posible “otra” vida (hace posible otra hoja, que no es ella misma)
Yo – también… pero en mí hay un germen especial, distinto: un germen de VIDA… una promesa de una nueva primavera: una RESURRECCIÓN definitiva: allí-seré-yo-mismo. No voy a ser otra persona (como le puede pasar a la hoja…). Seré YO – en cuerpo y alma – definitivamente!..

Señor, si la hoja que dura poco, cumple su misión…
Qué bien! Tu lo ordenaste así!
Qué queda para mí?
Tu me regalas esta vida, y además, pones en mí una promesa de que aquí no termina…
Me dices que esta es una preparación: un ejercicio para otra vida: una vida de Amor… eterno!.. Por eso me pides que ahora lo ejercite!
Mi persona se tiene que acostumbrar al Amor:
Y amor significa “desgaste” por el otro; crecer haciendo crecer al otro; vivir, ayudando a vivir al otro, como lo hiciste Tú, Señor de la Vida!

A Vos te gustó compararte con la VID; y si no estamos unidos a Ti, tu Savia (Amor) no circulará por nosotros.
Que no me separe de Ti, para poder llegar a ser una hoja con verdor eterno, una hoja con Vida… convida que dure para siempre! Amén.


(Julio-1989)

viernes, 14 de junio de 2013

Nuestra VIDA debe oler a Cristo.
La frase “nueva evangelización”.

El Papa Francisco destacó la certeza “cada vez más clara de que, también en los países de antigua tradición cristiana, es
necesario un anuncio renovado del Evangelio que vuelva a llevar a un encuentro con Cristo que transforme realmente la vida y no sea superficial y rutinario. Y esto repercute en la acción pastoral”.

El obispo de Roma citó en este sentido las palabras de Pablo VI en su discurso al colegio cardenalicio en 1973: “Las condiciones de la sociedad nos obligan a revisar los métodos, a tratar con todos los medios de estudiar cómo llevar al hombre de nuestros días el mensaje cristiano con el que solamente puede encontrar la respuesta a sus interrogantes y la fuerza para su compromiso de solidaridad humana”.

“Quiero alentar a toda la comunidad eclesial a que no tenga miedo de ‘salir’ de ella misma para anunciar, confiando sobre todo en la presencia misericordiosa de Dios que nos guía.
Efectivamente, las técnicas son importantes, pero ni siquiera la más perfecta de ellas podría sustituir a la acción discreta pero eficaz del actor principal de la evangelización: el Espíritu Santo.
Es necesario dejarse conducir por Él, aunque nos lleve por caminos nuevos;
es necesario dejarse transformar por Él, para que nuestro anuncio sea siempre el de la palabra acompañada por la sencillez de vida, del espíritu de oración, de la caridad hacia todos, especialmente los pequeños y los pobres; de la humildad y del desapego de sí mismo, de la santidad de vida.”

(Tomado de AICA - 13-06-2013)